No pienses mi nombre: pronúncialo.
No disimules una caricia: siéntela.
No me claves la mirada: obsérvame.
No digas que me quieres: ámame.
No leas esto: vívelo.
Trotar por la vida sin rumbo fijo; descubrir, observar, sorprenderse de que en la vida todos estamos perdidos.
Infeliz se le suele llamar a una persona insatisfecha de su vida, de sus quehaceres habituales. Si eres infeliz parece que no seas normal, entonces tu te preguntas ¿hay alguien normal? Pues querido amigo yo te contesto, NO, no hay nadie normal, ¡pero solo tienes que mirar a tu alrededor y te darás cuenta de todo!
Me doy cuenta de que el mundo gira, de que la gente no observa las cosas, de que nadie observa. Me miro y entonces observo en mí una persona ajena, con sus problemas, sus particularidades, sus alegrías, sus defectos, sus virtudes, se necesita ser franco con uno mismo mirando a otra persona.
La saturación, el estrés, la vida que nos lleva, ¡nosotros no manejamos nuestra vida!,nos mostramos cada día como no somos y nos saturamos solo por ese motivo. No poder mostrarnos tal y como somos, no saber mostrarnos, así nos enseñan como es el juego, así nos enseñan a vivir, a ver las cosas.
¿Has buscado alguna vez felicidad en el diccionario? La definición es: “Estado de ánimo que se complace en la posición de un bien”.
Yo no tengo ningún bien, pero en el fondo de mi alma soy feliz.
El tiempo nunca pasa sin más,
Aunque parezca que viva
el recuerdo de una vida
A cada instante.
Fui mujer maltratada por maridos,
gobernantes y guerras.
Fui corrupto juez
Firmando injustas sentencias
Fui bella nobleza
Riqueza y soledad espesa
Fui triste músico
verdugo de reyes,
Amante de infieles,
Y Mesías de puros.
Fui reina abominada
Lacayo y esclava
Fui la hija prodiga
Y hasta hoja de una rama
Fui tantas cosas
que ya no recuerdo
si llegué a ser la persona que soy
o si la que está aquí sentada
dando vueltas al café
seria algún día yo.